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¡El verano ya está llegando a su fin! ¿Dónde se ha metido? Dejando a un lado el pánico, ¡ha llegado el momento de que te entusiasmes de verdad con la universidad! Si eres como nosotros, dejarás la tarea de hacer la maleta para el último momento. Pero, por suerte para ti, tenemos años de práctica ayudando a los nuevos estudiantes a llegar al gran día de la mudanza, así que aquí tienes algunos consejos sobre cómo prepararla. Sin complicaciones

PIENSA EN PEQUEÑO, NO EN GRANDE

Tienes que ser realista sobre cómo va a caber todo en tu nueva habitación. Llévate mucha ropa, desde luego, pero quizá sólo una pequeña selección de tus colecciones de libros y DVD. Darte cuenta de que has traído demasiadas cosas es un momento de crisis. Te sentirás tonto, por no decir otra cosa.

Además, tienes que tener en cuenta cómo vas a llevar todas estas cosas a tu nueva universidad. No querrás estar metido en el asiento trasero de un coche, o maniobrando trillones de bolsas en el transporte público.

QUÉ ES ESENCIAL Y QUÉ NO LO ES

Para ayudarte a minimizar tus cosas, es buena idea dividirlas en lo que es esencial y lo que realmente no lo es. Ese premio que ganaste por ser el payaso de la clase cuando tenías quince años, ¡no es necesario!

Ahorra espacio en tus maletas pensando en lo que podrías comprar cuando llegues: los botes enormes de champú, acondicionador y gel de ducha sólo añadirán peso extra, cuando en realidad puedes aprovisionarte en el supermercado que hay a la vuelta de la esquina cuando llegues. Lo mismo vale para la bolsa gigante de pasta y las latas de alubias cocidas de todo un año que tu madre intenta descargar sobre ti.

Por otro lado, un par de cosas que no querrás olvidar son los libros de texto, el material de papelería para empezar (pero olvídate de comprar bolígrafos, los comprarás a montones durante la Semana de los Novatos), la ropa de cama y las toallas.

En cuanto a la ropa, sé sensato, pero haz la maleta para todo el semestre. Puede que haga sol cuando hagas la maleta, pero seguro que no va a hacer buen tiempo todo el año. Si eres un estudiante internacional, que obviamente no puede permitirse el lujo de volver a casa todos los fines de semana para comprar cosas que pueda necesitar, es especialmente importante hacer la maleta según la estación del año.

AVERIGUA PRIMERO QUÉ INCLUYE

Tanto si vives en una residencia, como en una casa compartida o en tu propio estudio, asegúrate de lo que incluye antes de derrochar en cosas que quizás ya tenga. La mayoría de los alojamientos vienen completamente equipados con tostadora, microondas y hervidor de agua, así que probablemente no tendrás que preocuparte por esos voluminosos aparatos eléctricos. Incluso si tu alojamiento no los incluye, puede que merezca la pena esperar hasta llegar allí por si alguno de tus nuevos compañeros de piso los ha traído consigo, ¡no necesitas cinco hervidores de agua bajo el mismo techo!

Sin embargo, necesitarás tus propias ollas y sartenes, utensilios de cocina, platos y tazas; pero recuerda que sólo cocinarás para uno, ¡así que no necesitas todos los utensilios de cocina del mundo! Tampoco tengas miedo de improvisar, forma parte de la diversión de la vida universitaria.

AÑADE TOQUES HOGAREÑOS

Con todo esto de las cosas que no son imprescindibles, puede sonar contradictorio que te diga que metas en la maleta unas cuantas chucherías para decorar tu habitación, pero, en realidad, es probable que estas cosas no ocupen demasiado espacio en tus maletas.

Los pósters, las fotos de tu mascota, etc., se pueden combinar fácilmente con tu ropa. Siempre está bien añadir unos pequeños toques personales a tu nueva habitación; al fin y al cabo, ¡vas a estar allí al menos los próximos nueve meses!

Seguro que acumularás más cosas durante tu estancia en la universidad, y muchas fotos de tus nuevas mejores amigas, pero no te cortes en hacer de tu casa un hogar desde el principio. Tener objetos familiares a tu alrededor también ayuda a aliviar la morriña.

EVITA LLEVARTE OBJETOS DE VALOR

Querrás meter en la maleta tu portátil, por supuesto, y ¿dónde estarías sin tu teléfono? (!) Pero otros objetos de valor probablemente no merezca la pena que te los lleves a la universidad. Como es probable que vivas con mucha gente, pueden ocurrir accidentes, así que lo último que quieres es que se estropee algo caro o valioso.

A este respecto, no olvides contratar un seguro de contenido general que cubra también tu portátil. Hay un montón de buenas ofertas para estudiantes, así que navega por la web para encontrar el mejor plan para ti.


¿NECESITAS MÁS CONSEJOS?

Si necesitas que te echemos una mano con cualquier cosa relacionada con el alojamiento antes de llegar, avísanos¡! Para más consejos sobre cómo prepararte antes de la gran mudanza, echa un vistazo a nuestro blog - tenemos desde consejos para estudiar hasta ideas para excursiones de un día que te ayudarán a conocer Dublín de verdad.