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7 maneras de planificar con antelación tu próximo año en la universidad

Si estás leyendo esto, ¡enhorabuena por haber sobrevivido a un año de universidad! Probablemente ya eres un experto en llegar a tiempo a las clases de las 9 de la mañana y en no empezar tus tareas la noche anterior a su fecha de entrega.

Así que, ¿por qué no continúas tu racha ganadora haciendo estas siete cosas para prepararte para el próximo curso, que te ayudarán a tenerlo todo bajo control, desde tus finanzas hasta tu tiempo de estudio?

1. ADELÁNTATE A LA LECTURA OBLIGATORIA

Las listas de lecturas -obligatorias u optativas- son estupendas para familiarizarte con el curso académico que tienes por delante, porque suelen seguir la misma estructura y orden que tus clases. Tómate un tiempo para familiarizarte con los textos, toma algunas notas, y en septiembre te sentirás mucho más cómodo con los temas que te esperan.

2. ELIGE TUS MÓDULOS OPTATIVOS

Una vez que pases al segundo o tercer año, la mayoría de los cursos ofrecerán una selección de módulos optativos en los que podrás elegir y mezclar algunos de tus estudios, siempre que completen los créditos necesarios para ese año.

Aunque los módulos optativos son estupendos porque te dan cierto control sobre lo que aprendes, son como la pizza gratis: desaparecen en un santiamén. Así que, si te has decidido por una opción concreta, asegúrate de conseguir una plaza en cuanto se abra el plazo de inscripción. Considera los módulos optativos como una oportunidad para explorar un tema inusual o adquirir una nueva habilidad. Todo el mundo competirá por la opción más popular, así que considera lo que puedes ganar eligiendo uno de los módulos menos convencionales si tu opción número uno está llena. Puede que ahora te parezcan un poco extravagantes, pero cuando estés sentado en una entrevista darán mucho que hablar.

3. APROVECHA TU TIEMPO LIBRE

Divertirse no está reservado sólo a los novatos, y ahora que te has asentado en la vida universitaria puedes aprovechar al máximo tu tiempo libre. La mayoría de las sociedades y clubes deportivos intentan organizar diferentes horarios de reunión, por lo que no deberías tener problemas para encontrar alguno que se adapte fácilmente a tu horario.

Disfrutar es una parte importante de la experiencia universitaria, y encontrar un buen equilibrio entre trabajo y ocio te beneficiará a largo plazo. Puedes utilizar una aplicación gratuita como MyStudyLife para llevar un registro de tareas, exámenes, etc., de modo que siempre sepas de cuánto tiempo libre dispones para relajarte y divertirte.

4. APROVECHA AL MÁXIMO TU DINERO

Llevar las riendas de tus finanzas puede que no sea divertido ni glamuroso, pero al igual que concertar tus propias citas con el médico, ahora forma parte de la vida. Ordenar tus finanzas antes del nuevo curso académico puede darte tranquilidad y ayudarte a centrarte en cosas más importantes, como navegar por el campo de minas político que es el trabajo en grupo, y convencerte de que puedes dormir 8 horas en 3 horas.

Revisa tus últimos extractos para ver dónde podrías ahorrar dinero, y parte de ahí. Te sorprendería saber cuánto puedes ahorrar simplemente reduciendo el número de cafés que compras a la semana. Asegúrate de que estás sacando el máximo partido al dinero que gastas, y si te das cuenta de que ni siquiera recuerdas cómo es el interior de tu gimnasio, tal vez sea hora de buscar una forma mejor de gastar ese dinero que en esa optimista afiliación.

Aprende un par de cosas de los compradores estudiantes expertos y aprovecha al máximo tu tarjeta NUS, Unidays y cualquier otra ganga que tengas a mano: créenos, echarás de menos ese descuento de ASOS cuando desaparezca.

5. EMPIEZA A PENSAR EN TU TESIS

Tu tesis debe ser un proyecto que te apasione, y nunca es demasiado pronto para empezar a pensar en un tema para ella. Si te diriges a tu segundo año, puede parecerte algo de lo que tendrás que ocuparte en el futuro, pero hazte un favor a ti mismo y haz una lista de algunas de las áreas que te interesan, o de las que crees que merecerían una investigación más profunda.

Cuando por fin llegue el momento, dedicarás mucho tiempo a tu tesis, así que no querrás tomar una decisión de última hora sobre el tema para acabar odiándolo a mitad de camino. La tesina no sólo es tu trabajo académico más importante, sino también la mejor oportunidad para dedicarte a algo que realmente te interese y que luego puedas mostrar a posibles empleadores.

6. ORGANÍZATE

Aprender a ser organizado es algo que beneficiará a todos los ámbitos de tu vida; es probable que ya tengas un borrador de tu horario, así que utilízalo como punto de partida.

En la universidad, la norma general es que el tiempo total de estudio a la semana sea de 40 horas, así que suma todas las horas de clase y de seminario, y luego calcula cuántas horas de estudio independiente deberías dedicar a ello. Intenta por todos los medios aprovechar al máximo las clasesporque te proporcionarán puntos de referencia vitales para tu tiempo de estudio independiente.

Una vez que hayas organizado tu tiempo de estudio, pasa a organizar tu escritorio. Tira a la basura los folletos innecesarios y archiva los documentos importantes y los papeles útiles. Despejar tu escritorio no sólo reducirá el estrés, sino que también te ahorrará tiempo a la hora de encontrar cosas: dedicar media hora a hacerlo ahora te ahorrará tiempo a largo plazo (¡en ese momento puede que no tengas media hora libre para rebuscar!).

7. RELÁJATE APROVECHA EL VERANO

¿Quién dice que "año nuevo, yo nuevo" está reservado a enero? Dejando a un lado la planificación, la mejor forma de prepararse para el nuevo curso académico es darse un tiempo de descanso. Ahora mismo, las vacaciones de verano pueden significar el cierre de todos tus clubes favoritos hasta la Semana de los Novatos, y el cumplimiento de la tan prometida visita de vuelta a casa, pero cuando acabe la universidad echarás de menos el lujo de estas largas vacaciones de verano.

No te pases el verano preocupándote por el año que empieza, porque si no, antes de que te des cuenta te habrás preocupado por todo tu descanso. Relájate, pasa tiempo con tus amigos, haz esa excursión de un día que llevas aplazando todo el año, coge un buen libro y disfruta del sol veraniego, o de todo el que podamos tener. Hagas lo que hagas, disfruta del descanso y en septiembre te sentirás como una nueva tú. Al fin y al cabo, la idea de planificar con antelación es ayudarte a relajarte y a mantenerte al día, así que no te pases el verano coloreando tus apuntes de repaso. En lugar de eso, sal y explora la ciudad antes de que la próxima ronda de novatos descienda sobre ella.


ENCONTRAR UN NUEVO ALOJAMIENTO

La búsqueda de alojamiento es siempre un paso importante en la planificación del año que empieza, y hay que tener en cuenta muchas cosas a la hora de buscar tu próximo piso.

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